Espaguetis con aceitunas y alcaparras

Esta es una de mis recetas de pasta favoritas, si tienes niños o no te gusta el picante, no le pongas la guindilla, pero, si te va la marcha, un poquito de picante le da mucha vida. En caso de no ponerle guindilla ponle pimienta molida suficiente para que no esté sosa. Es apta para vegetarianos.

Necesitas:

Espaguetis para cuatro personas
2 tomates grandes maduros
1 puñado de aceitunas negras
2 cucharadas de alcaparras
1 cucharada de pepinillos troceados
azúcar, sal y pimienta
orégano
guindilla (opcional)

Preparación:

En una cazuela pones los tomates pelados y partidos en trozos medianos (también puedes usar de bote pero troceado, NO triturado, aunque cambia un poco el sabor), con una cucharada de aceite, 1 cucharadita de azúcar, la sal, y la pimienta (y la guindilla si la hubiere), pon el fuego medio, y mientras se va haciendo, partes las aceitunas en trozos para quitarle el hueso, y los pepinillos.
Cuando el tomate esté un poco hecho (no frito, ni deshecho, la gracia es que esté entero pero un poquito cocinado), que será entre 5 y 10 minutos según el tamaño de los tomates y la cantidad de líquido que tuvieran dentro (tiene que reducirse un poquito), apagas el fuego, sacas la guindilla, echas las aceitunas, los pepinillos y las alcaparras, 1 cucharadita de orégano, otra de aceite crudo y lo dejas reposar tapado en su cazuela.
Cueces la pasta al dente y lo aliñas con la salsa. Puedes servirlo con un poco de queso rallado o sin él, al gusto.
Casi todas las salsas para la pasta se pueden hacer con antelación y generalmente ganan en sabor y textura. Luego sólo tienes que cocer la pasta a la hora de comer y aliñar sin calentar la salsa, así se enfría una pizca la pasta y te la puedes comer enseguida, porque la pasta no espera, se pone blanda enseguida.